Siempre hubo la intención de que la Gran Invocación fuera distribuida masivamente y se convirtiera en una plegaria mundial. Ahora, en un mundo cada vez más plural y multicultural, es necesario seguir dándola a conocer a tantas personas como sea posible. Este tema parece urgente especialmente ahora, ya que la Gran Invocación es el principal agente para transformar la voluntad humana hacia un mayor alineamiento con la Voluntad de Dios.
El lenguaje es un medio de expresión vivo y cambiante, que evoluciona en consonancia con los cambios en la conciencia humana. Por esa razón, tras un intenso debate, los miembros de la Junta internacional de Fideicomisarios de Lucis Trust y el grupo de la sede en los tres centros, concluyó que para la distribución masiva de la Gran Invocación – que es el propio mantra de Cristo para la era de Acuario – se permitían ligeras adaptaciones en el lenguaje sin cambiar su significado. El objetivo es que esta decisión permita a un mayor número de personas trabajar con la Gran Invocación en una forma ligeramente adaptada y, de este modo, seguir fomentando la transformación de la conciencia tan necesaria en este periodo de crisis planetaria.
Desde el punto de Luz en la Mente de Dios
Que afluya luz a las mentes humanas
Que la Luz descienda a la Tierra.
Desde el punto de Amor en el Corazón de Dios
Que afluya amor a los corazones humanos
Que Aquél que Viene retorne a la Tierra.
Desde el centro donde la Voluntad de Dios es conocida
Que el propósito guíe a todas las pequeñas voluntades humanas
El propósito que los Maestros conocen y sirven.
Desde el centro que llamamos la raza humana
Que se realice el Plan de Amor y de Luz
Y selle la puerta donde se halla el mal.
Que la Luz, el Amor y el Poder restablezcan el Plan en la Tierra.
(versión adaptada)